Filtrar
Para mantener una buena calidad del agua es esencial tener un agua equilibrada (pH, dureza, TAC) y un filtrado eficaz adaptado a su piscina y a sus condiciones de uso. Para el buen funcionamiento del equipo de electrólisis, el pH de la piscina debe mantenerse entre 7.2 y 7.4, por lo que se recomienda instalar un regulador automático de pH. Si el agua es dura, los modelos sin mantenimiento (inversión de polaridad automática) son altamente recomendados para aumentar eficacia y tranquilidad.